Las Almohadillas de los Perros: La importancia de su cuidado
Como dueños de perros, queremos a nuestros amigos peludos y deseamos garantizar su salud y felicidad. Las almohadillas de los perros son un aspecto que a menudo se pasa por alto es el cuidado de las almohadillas de sus patas. Las almohadillas del perro son cruciales para su movilidad y protección. Son el equivalente de las suelas de nuestros zapatos y ayudan a amortiguar sus pasos y saltos. Sin embargo, estas almohadillas son propensas a lesiones y quemaduras, por lo que unos cuidados e hidratación adecuados son esenciales. En este artículo, exploraremos la importancia de cuidar las almohadillas de tu perro y te daremos consejos para mantenerlas sanas utilizando bálsamo Dermissana.
¿Qué son las almohadillas de los perros?
La anatomía canina incluye un elemento crucial: unos tejidos gruesos, gomosos y resistentes situados en la parte inferior de sus patas. Estas estructuras proporcionan a sus huesos y articulaciones la misma protección que las suelas de nuestros zapatos. Sin embargo, son mucho más resistentes y duraderas.
Las almohadillas de las patas son distintas de la piel humana, ya que son más gruesas, resistentes y de color más oscuro. Además, cuentan con una amplia capa superficial que las protege de cualquier daño. Esta capa adicional también ayuda a amortiguar los saltos y las zancadas, evitando así cualquier daño articular o óseo. Además, la mayoría de los perros tienen cuatro almohadillas en cada pata, y la cuarta, conocida como almohadilla carpiana, está situada más arriba en la pata para proporcionar tracción adicional al correr o trepar.
Además de ser robustas y resistentes, las almohadillas caninas son increíblemente sensibles. Contienen numerosas terminaciones nerviosas y glándulas sudoríparas, que permiten al perro regular su temperatura corporal y mantener un agarre sólido en diversas superficies. Además, las almohadillas ofrecen al animal una forma de percibir su entorno y detectar alteraciones en la textura y el calor. En definitiva, estas estructuras son una parte extraordinaria del cuerpo canino y requieren una atención adecuada para mantenerlas sanas y en funcionamiento.
¿Cómo funcionan las almohadillas para perros?
Los caninos tienen una característica particular que les permite desplazarse con facilidad. Esta estructura consiste en una gruesa capa de piel hecha para soportar la presión y la fricción. Además, contiene una capa amortiguadora que proporciona comodidad y apoyo al atravesar diversos terrenos. Esta capa ayuda a repartir la presión uniformemente por todo el pie, evitando que una sola zona sufra demasiada tensión.
El pie tiene almohadillas distintas, cada una con una función diferente: La almohadilla más grande y significativa es la almohadilla central, que soporta el peso del can. A ambos lados de la almohadilla central están las almohadillas digitales, que ayudan a proporcionar agarre en superficies resbaladizas. La almohadilla carpiana, situada en la pata delantera, ayuda al animal a agarrar objetos y le proporciona ayuda adicional al caminar. Por último, la almohadilla metacarpiana, situada en la pata trasera, ayuda a mantener el equilibrio y proporciona amortiguación adicional al saltar.
Además, las almohadillas contienen glándulas sudoríparas que ayudan a regular la temperatura corporal del animal. Este sudor no sólo deja huellas húmedas en el suelo, sino que también ayuda a proporcionar tracción adicional en superficies resbaladizas. Además, las almohadillas están llenas de nervios sensoriales que ayudan al can a percibir la textura, la temperatura y las vibraciones del suelo que pisan.
Lesiones frecuentes
Las lesiones en los pies de tu perro pueden deberse a varios factores, como el terreno abrupto, el pavimento caliente y las condiciones heladas. El terreno abrupto puede provocar abrasiones y cortes, mientras que el pavimento caliente puede causar sensación de quemazón. Además, la congelación es una posible consecuencia de la exposición a temperaturas bajo cero, que puede provocar palpitaciones y una curación lenta. Para prevenir daños, se aconseja evitar pasear a tu can por tales superficies. Para añadir una capa adicional de protección, puedes comprar botas protectoras o almohadillas para los pies.
Otro daño frecuente que puede sufrir tu mascota son las grietas en los pies. Suelen estar causadas por la sequedad, las bajas temperaturas o el contacto con sustancias peligrosas. Una pata agrietada puede causar mucho dolor a tu can e incluso puede provocar una infección si no se trata rápidamente. Para evitarlo, asegúrate de hidratar correctamente las patas de tu perro y evita exponerlas a materiales cáusticos. También puedes utilizar bálsamos hidratantes o productos similares para ayudar a mantener sanos e hidratados los pies de tu cachorro. Examinar las patas de tu mascota con regularidad para detectar signos de lesiones puede ayudar a detectar cualquier problema a tiempo y limitar su gravedad.
Cómo cuidar las almohadillas de los perros
Es esencial que tu compañero peludo tenga un cuidado adecuado de sus partes del cuerpo, y una de las más importantes son los pies. Para mantenerlas hidratadas, aplícales un bálsamo para las almohadillas que contenga ingredientes naturales Bálsamo para almohadillas de perros de Dermissana Natura. Esto ayudará a evitar la sequedad y las grietas, manteniendo sus patas sanas e hidratadas. Además, evita pasear a tu perro sobre asfalto o superficies calientes, que pueden causar sensación de quemazón en sus patas.
Asegúrate de revisar regularmente sus patas para ver si tienen heridas o cortes. Los perros pueden herirse o cortarse fácilmente debido a terrenos difíciles, objetos afilados o incluso hielo y nieve. Si se encuentra alguna herida, limpia la zona con un antiséptico suave y cúbrela con un vendaje para evitar daños mayores. Además, recortar el pelo entre sus patas puede ayudar a evitar que se adhieran restos, disminuyendo el riesgo de infecciones.
Por último, córtale las uñas a menudo para evitar que se rasque las patas. Unas uñas demasiado largas pueden provocar dolores e incluso alterar su forma de andar, con los consiguientes daños a largo plazo. Si se las cortas, sus patas se mantendrán sanas y robustas. Si tienes dudas sobre cómo cortar las uñas a tu cachorro, consulta a un veterinario o a un peluquero profesional para evitar contratiempos.
Cortar las uñas del perro para proteger sus almohadillas
Cuidar los pies de tu compañero canino es una parte vital de su bienestar. Un componente importante es cortarles las uñas. Dejar que crezcan demasiado puede ser incómodo y suponer un riesgo de lesión o daño permanente. Además, unas uñas demasiado largas pueden afectar a su movilidad y provocar dolores musculares y articulares. Por tanto, es esencial mantener sus uñas a una longitud adecuada.
Cortar las uñas de tu cachorro puede ser una tarea complicada, sobre todo si se muestra indeciso o no coopera. Sin embargo, con una mano firme y las herramientas adecuadas, el proceso puede ser más fácil para ambos. Utiliza cortaúñas afilados que hayan sido creados específicamente para perros, para asegurarte de no causarles heridas ni angustia. Al empezar, examínales las uñas y localiza el rápido, la zona sensible de color rosa que contiene vasos sanguíneos. Es esencial abstenerse de cortar el quick, ya que puede provocar hemorragias y sufrimiento.
También es importante prestar atención a los espolones, las garras más pequeñas situadas en la cara interna de la pata. Si crecen demasiado, pueden engancharse en objetos y causar molestias y dolor. Por eso es importante cortarlas junto con las demás uñas. Si no te sientes cómodo con la tarea, siempre puedes pedir ayuda a un peluquero o veterinario profesional.
Video deln producto, como aplicar :https://www.youtube.com/shorts/zmRZTR3aSKg
También te puede interesar; Cuidados para la piel y el pelaje del perro